Reveladora (Margi Pg)

La silla había quedado húmeda desde la ultima vez
se habían confundido el sereno de la noche
y los fluidos de la explosión múltiple aquel día del cumpleaños
Sólo su recuerdo sabía el aroma desgastado
del perfume de marca junto a los suspiros de la noche

varios o muchos meses sola...
de esa soledad que te enajena
que te lleva a no desear nada sino su misma esencia
aprendió a tocarse y vibrar con su cuerpo
sin ayuda , sin motivo
sólo ella, con el alma que seguía despierta

Nadie había inspirado sus minutos
sino esa máscara
que le hablaba por las noches
esa falacia, esa mentira hecha verdad...
apagó la luz
se posó en su silla
pero su mente de blanqueó

Mientras lo hacía veía el amanecer
quizá algún vecino podría seguirla por una ventana
mejor así, era más osado
y seguía respirando
trataba ese día de fijarse en los olores
que expedía su cuerpo
amansaba cada cierto tiempo y seguía.

Se había vuelto obsesiva de sus sensaciones
de sus latidos, su pulso y sus sonidos
nada era tan intenso como la primera vez
por eso buscaba el tono primigenio
de su primer orgasmo
pero nada la llevaba a él
nada tan intenso.

La madrugada estaba fría
pero entre el ron y los temblores
su cuerpo estaba caliente
no pasaba algo distinto
y no deseo mas que pasarla bien
mientras que los cánticos de los pájaros iban apareciendo
ella subía por una cima
no sentía su cuerpo
no era tierra, ni fuego 
sino éter..

y en ese estado ocurrió la sorpresa,
pronuncio el nombre de su amor escondido
e imagino su voz diciéndole palabras al oído
y llenándola de vapor su cuello
ahí mismo vino un suspiro
balbuceaba unas palabras que no se entendían
se retorcía en la silla y tomaba miles de posturas

Si

experimentó una sensación como si
estuviera entre la vida y la muerte
flotaba entre ese hilo entre lo racional y lo brutal
había sido su nombre? su pensamiento?
o las ganas que él también le tenía,
seguramente estaría haciendo del otro lado lo mismo
y chocaron sus almas desde lejos
ella se elevó por el aire
y terminó en el suelo
respirando como si hubiera salido del fondo del mar
después de aguantar la respiración por dos horas
y así terminó su viaje
no sin antes reaccionar
y darse cuenta que una lágrima corría por sus ojos
se le vino un llanto escondido

Estaba enamorada